No hay nadie más,
ella y yo, nadie más,
un fricción constante
de distancia expectante,
una sensación exclusiva
de conexión definitiva,
un pensamiento permanente
de sentirnos muy presentes,
y no hay nadie más,
ni lo hubo, ni lo habrá...
que haga la noche brillante
y cualquier día emocionante,
una mezcla perfecta de saliva
sensual, pasional y lasciva
una amalgama tan imponente
que vuelve el frío incandescente,
somos ella y yo,
y el mundo se queda pequeño,
que no habrá quién nos pare
cuando hagamos realidad el sueño!
y es que me ronda una idea
provocativa y obsesiva:
tú eres la definitiva.
3 comentarios:
Creo que tienes que poner algo que supere a lo Maximo para poesias como esta...Sublime
La categoría de sublime solo la puede tener la persona a la que le escribo, las poesías se quedan siempre cortas....
tu si que eres sublime!
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